Spot de pintura luminosa. En Durante la reciente Guerra Mundial, alguno sobre cada seis soldados de EE.UU. tenia relojes pintados con radio

Spot de pintura luminosa. En Durante la reciente Guerra Mundial, alguno sobre cada seis soldados de EE.UU. tenia relojes pintados con radio

Pintar esferas era una tarea estupendo. No era complejo y estaba muy bien pagado. Muchas ganaban mas que sus padres. Conseguian unos 20 dolares semanales, un buen sueldo. «Las mas rapidas pueden conseguir inclusive el doble. Podria lograr el equivalente a unos 40.000 dolares al ano», cuenta Kate Moore.

Tintar esferas era un trabajo bastante bien pagado. Las chicas ganaban muy mas dinero que las padres

Utilizaban pinceles sobre cabello de camello excesivamente finos. Con el fin de afinarlos los chupaban. De este modo era la actividad, ‘chupa, moja, pinta’… y dorso a comendar. El radio se les colaba entre las dientes, como la arena.

Los miembros masculinos que trabajaban en el laboratorio, sin embargo, usaban un equipo de refugio. delantales forrados de plomo asi­ como unas pinzas de marfil de manejar el radio, un material que seri­a mas dini?mico que el celeste. Cuando las chicas empezaron a sentir que les salian extranos eczemas en la tez o que les dolia la mandibula, sus jefes las tranquilizaban diciendoles que manejaban cantidades insignificantes, que aquello era inocuo, que no fueran exageradas…

No prestaron consideracion -cuenta Kate Moore- a las advertencias de Thomas Edison , quien alerto de que «el radio puede producir un fin irreversible. Todo el mundo los que lo manipulan deberian escoger precauciones».

Katherine Donohue -madre sobre 2 ninos-, que acudio a declarar ayudada por su marido.

En 1922, las problemas sobre vitalidad de estas pintoras de esferas eran gravisimos. Algunas bien habian muerto en agonias atroces. Con el fin de Mollie debio de ser un alivio: fallecio entre horrendos sufrimientos en 1921. Tenia 24 anos.

En el colmo de la perversidad, las companias que las emplearon atribuyeron sus muertes a la sifilis desplazandolo hacia el pelo colaboraron en ello diversos medicos.

Ante la proliferacion de males extranos asi­ como la precipitacion de quejas, US Radium Corporation contrato al monitor de Harvard Cecil Drinker Con El Fin De examinar sus instalaciones. Dictamino que estaban contaminadas sobre radio, pero la compania sustituyo su informe por otro muy diferente en el que se sostenia que no habia dificultades desplazandolo hacia el pelo lo envio al departamento sobre labor sobre novedosa Maillot. En 1925, Alice Hamilton -colega de Drinker- descubrio el fraude y lo conto en una revista cientifica. Drinker logro editar sus conclusiones: «Incluso las sillas no utilizadas por las trabajadoras brillan en la oscuridad. Su pelo, rostro, manos, brazos, cuellos, vestidos, ropa interior, inclusive las corses, eran luminosos», se decia.

Testimonio agonico

En 1927, Grace Fryer encontro por fin un abogado que peleara por ella asi­ como por las cuatro companeras a las que logro convencer. Eran cinco moribundas. Sus oponentes lo sabian, Asi que intentaron prolongar el procedimiento.

Marie Curie se entero del caso: “Quisiera asistir, aunque el radio no se puede destruir Cuando ha entrado en el cuerpo”, dijo

Grace Fryer acudio a deponer desprovisto dientes, con un corse de sostener la espalda y no ha transpirado en silla sobre ruedas. Nunca pudo alzar el brazo para hacer el juramento sobre que diria la certeza. Aunque el pleito hizo que ‘las chicas del radio’ salieran en las noticias. Su caso se leyo en los periodicos de Paris y llego a Marie Curie, la descubridora del radio. «Me encantaria lograr ayudar. Sin embargo no Existen forma de destruir la sustancia Cuando entra en el cuerpo», dijo la premio Nobel.

Las cinco mujeres que presentaron la solicitud en 1927 estaban desahuciadas. 2 de ellas no podian ni levantarse sobre la cama. Dieron voz a miles de afectadas

Las abogados de US Radium Corporation seguian dilatando el procedimiento y el magistrado se lo permitia. El diario New York World www.datingranking.net/es/military-cupid-review se puso del ala de estas chicas. «No Tenemos excusas para dilaciones. Las mujeres se estan muriendo», clamaba en sus editoriales.

El lapso corria en contra de las chicas. Por eso decidieron aceptar la oferta sobre tomar diez mil dolares cada una sobre ellas (equivalentes a cien mil dolares sobre ahora) y, Asimismo, la compai±i­a correria a cargo sobre las gastos medicos.

Grace Fryer murio en 1933. Demasiadas sobre sus companeras fallecieron envenenadas sin haber recibido ninguna gratificacion. Investigaciones medicas posteriores mostraron que, al chupar los pinceles, estas trabajadoras ingirieron al ano dentro de cientos y no ha transpirado miles de microcurios (unidad sobre ejercicio radiactiva). La barbaridad.

Consecuencias positivas

El radio -que Asimismo mato a Marie Curie, en 1934- se siguio usando de iluminar relojes hasta 1968, aunque con medidas protectoras. No se sabe la cifra exacta sobre victimas sobre la pintura radiactiva, sin embargo solo US Radium Corporation dio empleo a unas cuatro mil iluminadoras de esferas. Asi­ como hubo mas companias del moda.

La fruto optimista de esta terrible tragedia podri­a ser en 1949 el Congreso sobre EEUU aprobo compensaciones Con El Fin De las enfermedades provocadas en el trabajo y se mejoraron las medidas de seguridad laboral.

Recorte de prensa sobre el causa por envenenamiento

Luego de la sentencia del caso de ‘las chicas del radio’, Joseph P. Knef -el dentista sobre Mollie- analizo nuevamente los restos del hueso de la mandibula de la chica desplazandolo hacia el pelo encontro un importante grado de radiacion. Como causa sobre su asesinato figuraba la sifilis.

DE SABER MAS

Las chicas del radio, de Kate Moore (editorial Capitan Swing).

Posted in Military Cupid visitors.

ใส่ความเห็น

อีเมลของคุณจะไม่แสดงให้คนอื่นเห็น